viernes, julio 06, 2007

La mierda o nada II. Réplica

Puede ser una soberana estupidez, una tontería, una actitud inaceptable...pero es verdad. Somos más mierdas de lo que la misma gente puede pensar.
Ayer por la noche estuve pensando largamente en esta palabra, mierda, y sus múltiples interpretaciones; también en las variadas impresiones que causa. Sin embargo, ¿qué sucede con lo que la gente piensa? Muchas veces he tenido conversaciones como ésta:
-"mmm, no sé por qué terminaste con ella, si es tan linda"
- Tendrá la cara bonita, pero como persona es una mierda"

- "Es simpático, pero es una mierda como profesor"
- Tienes razón, y de ser así, es una mierda como persona."

- "¿Vas a ir a comprar?"
- "Ándate a la mierda y déjame tranquila"

-"¿Por qué mierda eres así?"
- "Por la mierda, cállate."

...Y muchos más diálogos en los que se le invoca a la mierda, se ruega por ella, se contrasta con ella, se establecen semejanzas con ella. Es terribel, sarcásticamente divertido.
Si uno opta por aceptar que es una mierda en ocasiones -algunos lo serán eternamente- está dando un gran paso. Mi buena amiga Bárbara me lo confirmo, cuando dice que "Hay mierdas de corbata, hay mierdas de sombrero, hay mierdas que roban sin criterio, hay mierdas que engañan, que violan, mierdas pedófilas. Pero así también hay buenas mierdas, mierdas buena gente que se pasan la vida sacrificándose por conseguir cosas desde su posición de mierda, sin escalar a posiciones ambiciosas." Muchas de stas palabras son las precisas para calificar al mundo de hoy, para clasificar al mundillo ocioso y oportunista al que pertenecemos.
Analicemos lo siguiente: se es nada, se quiere tenerlo todo, pero no se puede. Varios intentos lo demuestran, pero la vida y sus circunstancias no lo permiten. Entonces se comienza por autocalificarse como una mierda, por simple rabia, por dañarse a uno misma, ya que ni los demás lo hacen, tal vez que no se es nada más que una mierda. Y ahí está el problema: la gente cree que insultando a los demás, haciéndoles creer que es una mierda-mierda, deja de ser una gran-mierda y se convierte en una GRAN-PERSONA, porque cree tener el poder de la calificación, de la selección, de la descalificación, que es peor.
Cómo no van a ser una grandes-mierdas aquellos que no reparan más que en sí mismos; que cuando se les menciona la palabra pobreza parece ser que se les está cargando con una maldición, y cuando se les dice la palabra dinero, esta parece gastarse. Que se vayan a la mierda.
Como lo dijo
Bárbara, hay mierdas de toda clase, pero se olvidan de que TODOS VAMOS AL BAÑO, y que difícilemente alguien nos ve. Ahí astá lo terriblemente sarcástico con ese toque de divertido: ese espacio tan privado dentro de 4 paredes sirve para una misma cosa. Para que las mierdad de personas, o las personas de mierda descarguen su cantidad diaria de mierda, de egoísmo, de maldad, de envidia, de cinismo, de las falsas ínfulas, de las malas palabras, de las frases hirientes. He ahí que aparece el hedor, eso que no queremos que nadie perciba. Para ello hemos creado toda clase de aromatizante.
Nos creemos mucho o poco, tenemos mejores o peroes baños, usamos wc o un simple pozo...
No pretendemos hacer de esta mierda de mundo un lugar en que se pueda vivir cordialmente, sino que hacemos lo contrario: lo llenamos cada día más, de mierda, de basura, de engaños y de apariencias. Disfrazamos las palabras por creer que las cosas deben hacerse de un modo elegante. Oh, por favor..!